Puesto que somos seres únicos:
Abre la ventana de tu vida y deja que entre el sol de la
mañana y el frescor de cada noche…prepárate para celebrar tu fiesta personal.
¿Qué te impide celebrar?
Si la felicidad en definitiva está dentro de nosotros.
Así que baila, salta, sonríe… Estos gestos nos ayudan a liberar las endorfinas,
a tonificar los músculos…Además, tiene beneficios cardiovasculares y lo más
importante, nos conecta con nuestro niño interior, estimulando la creatividad.
El niño tiene la felicidad como esencia, nace con una energía
rebosante y sigue el ritmo de su propio corazón. Se enfrenta a los obstáculos
con valor y entusiasmo. Tiene la mirada limpia y sueña en el presente.
Recuerda:
la felicidad depende de cada uno, y es importante encontrar la manera personal
de ayudarnos, de romper con los pensamientos rumiantes, circulares que nos
hacen recordar el pasado. Para ello, usar un mantra (una frase, una palabra) en
el momento que empezamos a bajar la escalera de nuestros pensamientos nos hace
subir el ánimo. Siempre adelante, lo voy a conseguir…son expresiones que
conscientemente nos devuelven a la realidad y nos ayudan a alcanzar nuestros
sueños. Crea tu propio mantra.
En definitiva, se trata de mover nuestra energía, la del niño que llevamos dentro, a través de los pensamientos, sentimientos y el propio cuerpo en la búsqueda de la felicidad interior, en el aquí y ahora. Agradecer cada momento y a todos que nos acompañan… ¡A CELEBRAR LA VIDA!
Libro recomendado:
Lecciones del monje que vendió su Ferrari. Robin S. Sharma. Sabai
Ediciones T-Sunami, 2010. (Libro+DVD)
Película recomendada:
Pequeña Miss Sunshine, Directores:
Jonathan Dayton y Valerie Faris, USA (2006).
Jacqueline
Graff Munaro
Profesora de
Competencias Básicas de PCPI- Departamento de Orientación
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